Somos más vulnerables a padecer determinadas patologías, entre ellas la osteoporosis, caracterizada por la pérdida de masa ósea y por el aumento de la fragilidad de los huesos, aumentado los riesgos de fracturas. ¿Por qué nos afecta más? ¿Se puede prevenir? La respuesta a esta última pregunta es sí.
Somos más vulnerables a padecer determinadas patologías, entre ellas la osteoporosis, caracterizada por la pérdida de masa ósea y por el aumento de la fragilidad de los huesos, aumentado los riesgos de fracturas. ¿Por qué nos afecta más? ¿Se puede prevenir? La respuesta a esta última pregunta es sí.
Las mujeres somos más vulnerables a padecer determinadas patologías, entre ellas la osteoporosis, la cual se define como la pérdida de masa ósea en la que el hueso se vuelve más frágil, lo que aumenta el riesgo de fracturas. Entre los factores de riesgo, médicos y especialistas incluyen el hábito del tabaco, el sedentarismo, una dieta pobre en calcio, el exceso de sal, el consumo elevado de alcohol, el infrapeso (estar demasiado delgado implica tener menos masa muscular y grasa para proteger los huesos), los antecedentes familiares, la menopausia y el ser mujer.
Los huesos de la mujer son ya de por sí más frágiles y menos resistentes a lo largo de de su vida. Tras la menopausia, la fragilidad es aún mayor, ya que los estrógenos (los cuales descienden con la menopausia) juegan un papel esencial en la preservación de los huesos.
La osteoporosis es una patología que puede ir evolucionando sin que en sus fases iniciales se presenten síntomas que nos hagan sospechar. De hecho, en muchos casos, la fractura de algún hueso suele ser la primera señal evidente. Y es que las fracturas son la principal consecuencia de la osteoporosis, fracturas que aunque pueden darse en cualquier hueso de nuestro esqueleto, suelen ser más frecuentes en las vértebras, cuello del fémur y muñecas. En el caso de las vértebras, las más afectadas suelen ser las dorsales y las lumbares, produciéndose generalmente por aplastamiento.
Por su parte, la fractura de cuello de fémur, más conocida como fractura de cadera, es una de las más graves.
Además, suele requerir en muchos casos intervención quirúrgica. La fractura de muñeca es muy dolorosa y puede conllevar complicaciones como la rigidez o la deformación de las articulaciones.
Prevención osteoporosis
La prevención es esencial en la osteoporosis. Prevención a través del estilo de vida, la dieta y el ejercicio físico, el cual entre otros beneficios nos ayuda a mantener la masa ósea, la masa muscular y a ganar en habilidad. Los ejercicios físicos más recomendables son el caminar, realizar carrera lenta, gimnasia de mantenimiento, tenis o danza aeróbica.
Apostar por unos hábitos de vida saludables es invertir en salud, no solo para prevenir la osteoporosis, sino también otros problemas de salud. Entre estos hábitos, la dieta y el aporte correcto de calcio a las necesidades de nuestro organismo en cada etapa o momento de la vida. En el caso de las mujeres, durante el embarazo, la lactancia materna, en la etapa premenopáusica y durante la menopausia, las necesidades de calcio son mayores.
Fuente: ellahoy.es
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